Cap.2: Sergio Baba, escuadrón mochila y su terrible parecido con Layín o el PRI

«Todo existente nace sin razón, se prolonga por debilidad y muere por azar.»
Jean-Paul Sartre

Los problemas mentales que causan las funas, la tibiedad o el amiguismo.

Derecho a réplica

Se encontró el agua con la mucha sed que llega a dar no tener criterio, ni estudios, ni nada interesante de qué hablar ni hacer, más allá de tomar fotos muy parecidas a las que toda la gente sin un gramo de cerebro toma en redes sociales. Y es que generalmente la gente que sin ninguna formación relevante, que lo mucho o poco que ha leído en sus treinta y tantos años de vida se reduce a sus propias publicaciones en facebook desacreditando experiencias de mujeres abusadas, a publicaciones predicando como lo más importante del mundo el respeto a sus amigos agresores, logran conseguir gracias a esos amiguitos agresores (o algunos muchos otros igual de analfabetas [puedes ser analfabeta y un ser productivo para la sociedad perdónenme porque suene despectivo pero estoy siendo descriptivo con su capacidad de raciocinio] y sin ninguna credencial) un espacio en el gobierno. Esto es así, y es aún peor en un estado reconocido por figuras nacionales e internacionales por ser muy parecidos a ellos.

Hilario Layín, Edgar Veytia, Roberto Sandoval, Ney Gonzalez, Héctor González Curiel, alias el toro, Sergio Barba, todos tienen algo en común: el estar metidos en círculos de políticos y gente sin criterio que haría lo que sea por votar por ellos y aplaudirles.

Cuando Gonzalo aún con vida; Gonzalo mi amigo que estudiaba constantemente todas las capitales del mundo, que diariamente escribía al menos unas 400 palabras, que leía libros como The catcher in the rye, A demon haunted world, On the road, The naked lunch, The Kentucky Derby is decadent and depraved en inglés, naturalmente, que muchas veces juzgaba a Doctoras de la carrera de enseñarnos métodos de los 70 cuando en los 90 en Francia ya se había empezado a utilizar un método mucho mejor estudiado y próximo a ser aplicado en nuestro entorno, muchas veces platicamos de Layín y de como hasta en Tuxtla Gutierrez de Chiapas donde en ese momento Anahí se casaba con Manuel Velasco, otro lugar en México muy parecido a Tepic, se sabía de la amplia fama de los ojetes políticos nayaritas.

Mordiendo la mano que le da de tragar constantemente (atreviéndose a dárselas de crítico político cuando de éstas solo tiene la segunda y a medias) Sergio Baba había aprendido un juego muy interesante de proteger a sus amigos. Nadie podía desacreditarlos de abusadores sexuales, de agresores físicos, ya ni siquiera de prolíficos vendedores a costa de su nula preparación para hacer un producto «artístico». Él tenía el poder de la horda que Layín tuvo en su momento y que, a pesar de levantarle la falda en público a una menor de edad, podía salir en la televisión local, y nacional, aún ofendiéndose si le preguntaban se le hacía correcto que le hicieran lo mismo a su madre.

El poder ciega terriblemente, tener a 16mil becerros chupándote el pito te hace pensar naturalmente que tu pito es de chocolate o de oro. Y que eso, en esta sociedad falo-centrista, tristemente en su mayoría analfabeta, te puede servir a crear tu propia narrativa. No hay nada más poderoso que las narrativas, las narrativas nos quitaron a Sócrates, Jesus de Nazaret, Copérnico, Lorca, Turing por mencionar a algunos. Naturalmente la gente detrás de esas funas que resultaron en desgracias para la humanidad se sentían muy humanos por proteger a sus amigos, se sentían muy respetuosos por no dejar que pensamientos críticos (aunque a veces majaderos, existe la historia de Jesús destruyendo las tiendas que profanaban un templo), Hitler se sentía muy crítico y humano y respetuoso y buena vibra (para los casi 80millones de seguidores de su doctrina nazi dentro de aquella Alemania racista dictatorial) también hacía lo que sea por defender a sus amiguitos aunque violaran y violentaran constantemente (y también era aplaudido).

Así pues a lo largo de la historia y en todas partes del mundo han existido «líderes» que vendiendo su narrativa de buena vibra, poca preparación e ignorancia tienen un puesto político en su localidad y lo utilizan para mantener al pueblo en un ciclo de estupidez y acoso. Sergio Baba amaba esto, que le aplaudieran sus piecitos y la sombra que pisa. Era tan necesario para él escribir 20-30 palabras y pensar no solo era bueno redactando si no que era bueno en sus acciones y argumentos. Y esa gente que con el tiempo ya no escuchaba a los romanos con un buen discurso de unas 500 o 1000 palabras , si no que leía máximo 50 palabras de un cabrón probablemente closetero, buscaba lo mismo, algo de drama y entretenimiento y si eso llevaba a una crucifixión mediática o literal estarían muy pero muy complacidos.

El carisma es uno de los fuertes de estos líderes de hordas estupefactas, también el drama, hoy en día Netflix plagado de dramas que tristemente son muy cortos a veces, la gente sale a buscar (como hace 500 mil años sus ascendientes los homo Neandertales salían a recolectar) en su facebook algo más y ahí está Sergio baba, diciendo que esa morra se lo buscó por puta y que su amiguito es su amiguito y él lo va a defender porque amistad y porque él tiene valores. Así es esto, siempre será más sencillo leer 30 palabras predicando el respeto a sus amigos que un libro, que va, un ensayo de 4 hojas.

Aunque a mi parecer en el futuro es más probable se lea un libro bien redactado y justificado aunque sea de 2,000 que uno de 50 hojas predicando ser poesía u 800 palabras reunidas de todas las funas que Sergio Baba amaba redactar. Es más probable se lea un libro como Mein Kampf, se lea sobre los grandes maestros que no escribieron ni una palabra en vida como Siddharta Gautama, que sin duda sí era buena vibra (equis de) y sin duda se hubiera quedado sin seguidores (o «amigos») en un momento buscando su iluminación (y en varios pasajes de su vida así fue). La historia juzga y generalmente una vez que ya nos han quitado (o nos hemos quitado como sociedad) a mentes críticas, ávidas, sin pelos en la lengua.

Como sea todo empezó cuando funaron a mi profesor Leonchito, por intransigente, crítico y poco ortodoxo, por ser humano y tener problemas mentales o contratiempos a pesar de su excelencia en la docencia y la literatura. Porque la sociedad se ha vuelto así quizás desde antes de la primer funa llevada a cabo por Martin Lutero allá por 1500, y no me malentiendan, no desacredito las funas ni la horda de ineptos que las aplauden no por honestas, sino por su nulo criterio. Las funas pueden ser honestas, pueden servir a que la gente se exprese sobre una agresión que el gobierno no tomará en cuenta o solo por tomar el poder.

Quizás inició aún antes de Leonchito cuando yo ya criticaba un libro de 270 pesos en preventa (por un personaje que probablemente había leído 2 o 3 libros en toda su vida y su noción de poesía se basaba en decir «nena», «café», «cigarrillos», “orgasmo” y la no más imbécil: «quema esto el fuego purifica») promocionado, aplaudido, comprado al por mayor en mi medio mientras otros libros, mucho más baratos y producidos también en Nayarit tenían que buscárselas en otros países como Francia para ser vendidos.

Quizás inició aún antes, quizás todo se remonta al 2014, el año en el que Sergio Baba inició su proyecto, una especie de séquito de materialistas superficiales, de fotógrafos acosadores y modelos agresores y en general gente tibia que les aplaudía por promover lugares preciosísimos del estado y gente tibia de la comunidad que sabía de sus constantes agresiones pero no hacía nada porque el tipo ese era muy sonriente y tenía una horda de retrógrados y más que nada no meterse en pedos porque entre no me han hecho nada a mí personalmente y «hay que saber dar la otra cara» o porque «hay que ser buena vibra con todos» o porque es mejor no tener un pedo con nadie y ser un doble cara que tener pedos con medio mundo de la comunidad por hablar de un polítiquillo inepto y su círculo de agresores.

Siempre es más fácil ser agachón y justificar tus conductas que perpetúan la basca de México que tenemos. Naturalmente México ocupó el impulso de la Independencia de las 13 colonias en 1776 para hasta el año de 1810 ellos hacerlo, para los que son de escuadrón mochila y no saben contar esos son 34 años, casi la edad de su líder (así es, como en culto) y a pesar de la independencia que duró 11 años en México (podrían leerlo, esto es cierto) mucha gente seguía chupando falo de Español, o en su momento Francés o Austriaco o Norteamericano a pesar de que su propio pueblo les clamaba rebelión, educación, dejar de ser tibios y levantarse por eso que está mal en la vida…

Soy un grosero majadero pero no un justificador de agresores sexuales, soy una persona con carreras truncas pero finalmente con educación (gracias a Dios) soy una persona compleja, no soy una palomita blanca, también he agredido de alguna u otra manera, he atentado contra la cultura, contra alguna que otra mujer u hombre relacionándome sentimental o sexualmente, he atentado contra mi comunidad al delinquir fumando mota en los parques donde reúno personas para expresar el bello arte del baile y enseñar, y crecer una comunidad que se basa en el respeto y en la nula solapación (no creo sea una palabra ni la voy a buscar, pónganle que es un neologismo de solapar) he grafiteado en la estructura culerísima que gente probablemente igual de culta y “bien intencionada” como Sergio Baba y su escuadrón de clasistas de Tepic hizo en ciudad de las artes, no soy el mejor artista, escritor, bailarín, amigo, hermano, hijo, estudiante, ni miembro de la sociedad, pero verga, no soy un miembro de escuadrón mochila, no soy susana leal, no soy roxana borja, no soy miguel parra, no soy kevin lira, no soy Sara que la neta no sé su apellido y me da mucha hueva buscar, no figura en mi vida y probablemente en la de ninguna persona relevante en vida, la morrita esa que baila twerk o no sé. Soy una persona que escribe mucho, mucho más que las funas de Sergio baba y que me disculpo si les da flojera leer más de un post de facebook de 20 palabras hablando sobre los groseros, los sueños y los amigos, o el drama, honestamente me disculpo.

Duré 3 días sin dormir, soy un paciente psiquiátrico y es evidente en mi obsesión compulsiva al tirar mierda al libro más basca que he leído este año, libro que se ha presentado en distintos sitios y aplaudido por «artistas» que «ayudaron» que «dieron el visto bueno», 3 días sin dormir escribiendo réplicas a gente sin un peso de criterio, esto solo es una parte de mi novela semi-autobiográfica que utilizaré como tesis para la Universidad de Guadalajara, en Jalisco México.

Ésta es la lámpara que prendo en la oscuridad, me cansé de maldecir la oscuridad por 3 días en redes sociales, de defender a mi familia que nada tenía que ver en el tema y nada han hecho mal, me cansé de quererme matar por no poder dormir, me cansé de los comentarios de gente aplaudiendo y comprando la basura de producto que venden y la basura de narrativa que traen todos esos, de toda esa gente que no puede romper el pacto patriarcal ni compartirme porque soy intransigente porque soy grosero porque ahora después de una funa por grosero soy un ser nefasto, etc. Me cansé y preferí de esto sacar flores. Flores para todos y cada uno de las víctimas de escuadrón mochila, víctimas de agresiones sexuales, físicas y funas sin fundamento, víctimas del clasismo, superficialidad y capitalismo que imperan en esta sociedad corrupta, víctimas del gobierno de peleles, víctimas aquí les traigo un ramote de flores. Besos y amor.

POST DE FACEBOOK JUSTIFICANDO MI MAJADERÍA

Quiero decir que en base a los acontecimientos que sucedieron los últimos días que yo respeto la profesión de los vendedores, políticos (no tanto la verdad), administradores, doctores, maestros, enfermeros, artistas, etc. Que toda mi vida me he enseñado a respetar y amar las bellas profesiones de nuestra hermosa sociedad. No hay una profesión que haga menos que otra, no considero los licenciados en turismo sean peores o mejores o más críticos que un fotógrafo, que un sacerdote, Dios, no creo que un Ingeniero sea más crítico que un albañil o que tenga menos o más derecho de crear y expresar arte. Realmente creo, y defiendo a capa y espada que todos podemos, tenemos el Don del arte, de la creatividad y de la expresión. Todos tenemos un poco en algún lado, el Don del baile de la música, de la retórica. Algo que desprecio terriblemente por mis principios, los principios de amor a la sinceridad, al trabajo honesto y duro, al pensamiento libre y la libertad de señalar algo mal en la sociedad, además de la condescendencia y a la manipulación de borregos es, en definitiva, la charlatanería. Se me enseñó a decir las cosas por su nombre y eso es lo que hago, tú sabes que hablo y hablo pero con base en algo honesto, y le pregunto a la gente que siente… jaja si digo (o escribo) algo considero es porque viene del corazón (al menos del mío) trato de hacerlo de la manera más ecuánime (quizás al principio y luego de ser tirado al loco me ofendo un poco, lo siento, peco de humano) y si no es profundamente honesto con mis valores es, cuando menos, (o trata de ser) chistoso. Así que sí, lamento si sienten ataqué personalmente a alguien, si dejé que mi juicio se nublara por una agresión hacia algo de lo más preciado en mi vida, que es el arte. La verdad es que yo, como muchos artistas (y más los urbanos) he recibido críticas (sin pedirlas) y señalamientos groseros por no hacer algo instucionalizado, desde los 13 años he aprendido a putazo duro a recibir la crítica de mi creación, que en ese momento en secundaria era la exposición física de mi persona , bailar era ya medio Joto decían, y solo pensaba en Billie Elliot, me veía pendejo con movimientos «alocados», «tratando de amarrarme los brazos». Con el tiempo expuse también mis escritos, muchas incoherencias a veces, los poemas de los niños de secundaria son muy chistosos, cuando empiezas a escribir (y quizás hasta durante mucho tiempo después) se nota bastante tus influencias, a veces tus temas no salen del Jaime Sabines que lees todos los días como maniático, de Benedetti, de Juan Gelman, no sé,. Pero también recibí críticas, a veces las tomaba personal y a veces solo me dolían y ya no quería seguirlo haciendo. La verdad es que aprendes a lidiar con eso, a crecer de eso, a trabajar duro, y a entender que escribes por ti y no para vender, es decir obviamente en una sociedad capitalista *Hacemos todo por vender, aunque a veces es cierto, inconscientemente, cómo sea, me parece trabajo diariamente para ser más auténtico y sincero, para entregar un mejor trabajo siempre. Puta, esto lo escribo con mucha calma y poca corrección, me disculpo por el poco esfuerzo puesto en este post pero, quiero, deseo, con todas mis fuerzas que todos los seres consigan la felicidad y las causas de la felicidad, que todos los seres consigan librarse del sufrimiento y las causas del sufrimiento y que vivan en ecuanimidad, libres de parcialidad, apego y aversión.

Y también a través de mi dedicación, librar al mundo de todas las doctrinas falsas y extremas que puedan aquejar la existencia de los seres.