La historia de tu vida

Yo podría escribir la historia de tu vida. Los pasajes más importantes los tengo muy claros: los viajes a la playa, los numerosos primos y tíos, las fiestas y los atardeceres.

            Quisiera hablar de tus cariños sin incluirme, quizás eso sería más adecuado, pensar en tu vida sin ese limbo en el espacio-tiempo donde te tuve cautiva en mi amor (distante pero posesivo), en los cauces turbios de mi adoración. Tu primer cita, el primer beso, el primer chico que consideraste novio y todas las experiencias gratificantes llenas de amor que han abundado en tu vida.

            En el sueño de anoche estaba perdido uno de tus perros que no conocí más que en fotos, yo desesperadamente lo buscaba en el gran hotel esperando ser tu héroe pero la manera que bajabas tus lentes para reconocerme me lastimó en lo hondo del pecho. Muchos días ya sin ver tus ojos y con el tiempo estos días se convertirán en años. Desperté con una sensación de agitación y tu mirada clavada.

            La historia de mi vida nunca había hecho sentido hasta ti. Te lo dije incansablemente como si eso fuera a darle algo de importancia a mi pasajera compañía. Todo lo que había hecho hasta entonces resonaba en las dos ventanas escondidas detrás de tus gafas de sol.

            Entraba de una habitación a otra llamando por tu mascota, miraba bien de cerca a los demás que paseaban libremente con su dueño emulando los pasos. Como una sombra de tus pasos soy que recorre toda tu actividad constantemente.

            Pero todo tiene que estar sesgado, esa es la naturaleza de nuestra memoria, la condena de nuestra percepción. Y te recuerdo riendo de lado a lado, tomándome de la mano para conocer un lugar nuevo, declarando con la dulzura de tu voz lo implacable de mi alma, con un paso decidido, distintivo, una soltura y belleza al marchar sabiendo que el mundo terrenal no merece tus pasos (y nunca lo hará).

            Quisiera correr a contarte todo lo que he aprendido en tu ausencia pero lo más importante ha de ser el dolor por la perdida de dejarte ir, buscar abandonar toda ilusión del reencuentro. Como un náufrago esperando tu tierra firme. Y recomienda mi padre te olvidaré cuando mi mente te suelte o nuestras arrugas se encuentren. Porque es cierto que has sido de algunos hombres y yo no he dejado de ser tuyo a pesar de las varias mujeres.

            Nuestros cuerpos han de encontrarse y si no así serán nuestros corazones. En algún momento ha de vagar tu pensamiento y recordar esos días que anulas por dolor.

            Bajo las horas de desvelo encuentro calma en el recuerdo de tu risa rompiendo como las olas de mar en la arena. En mis ganas por tomar tu mano solo para encontrarla cada vez más cerca de mí. En los parques donde moría por morder tus labios y probar tu sonrisa y en diversas ocasiones tuve éxito.

            Cerca del mar y de las montañas donde numerosas veces nos mirábamos inconsolables y ansiosos por el otro parece que conozco bien tu aroma y tu voz. Una especie de mezcolanza de tabaco, perfume y coco, tan dulce como el agua de arroyos y tan violenta como el agua de mar. Muchas veces te llamé por tu nombre para olvidar toda cursilería. Tus nombres tan hermoso como tu mente y determinación. Admirado en tus lecturas e investigaciones, me quemé como Ícaro volando muy cerca del sol.

            Cerca del cerro de San Juan veo una nube muy grandota y me hace pensar en el mucho tiempo que estuviste en el aire a lo largo de tu vida. Los regalos de tu abuelo materno y las largas conversaciones con tu madre que casi conozco. Su personalidad fuerte como las de una mujer inteligentísima, versátil y amorosa. Me vas a odiar por hablar tanto de ti, pero bien podría ser cualquiera, bien podría ser ninguna y todo un producto de mi imaginación como hasta ahora también has sido. Tanto un mundo de fantasías como un cruel romance fallido. Si bien tú puedas odiarme al saber que todo esto es sobre tu vida bien prefiero más eso que tu indiferencia.

Me gusta pensar que causé en ti algún mínimo gusto. Aunque te recuerdo desde fotos y videos familiares como alguien más bien abyecta, complicada de satisfacer del todo. Llena de fruta.

Publicado por Daemon S. Viatorem

Aficionado de la música, el baile y los viajes espirituales. Estudiante de Escritura Creativa por la UdG. Porretas Muertos. [Viajero Demoníaco] Forastero

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: